Yo siempre digo que la mayor suerte en las oposiciones no son las bolas que te salen, sino el tribunal que te toca. Saber cómo viven los miembros de los tribunales el proceso de las oposiciones es muy importante, porque nos ayuda a comprender qué mecanismos psicológicos les mueven y, por tanto, nos ayuda a prepararnos teniendo en cuenta esta realidad.
Hay que tener muy en cuenta que un miembro de tribunal hace su función obligado por un sorteo, ya que le supone quedarse sin un mes de vacaciones, vivir jornadas de extraordinaria tensión y largas horas de trabajo por unos 1300 euros. Es muy poco para lo que se les exige y para la enorme responsabilidad que tienen.
Hoy tramos, como en otros años hemos hecho, las opiniones de Belén Romero Galán, que ha sido miembro del tribunal número 20 de las oposiciones de Lengua de Andalucía 2023. Conocí a Belén en 2017 al prepararse con nosotros en Opolengua y desde entonces hemos mantenido el contacto. Fue una gran opositora, constante e inteligente y sus opiniones no deben caer en saco roto porque tuvo grandes experiencias como opositora y ahora las ha vuelto a tener como miembro de un tribunal de oposiciones. Desde aquí le queremos agradecer su gentileza al contestar nuestras preguntas.
No quería volver a este proceso que tanto me había supuesto años atrás.
Pregunta: ¿Qué sentiste al saber que te había tocado estar en los tribunales de oposiciones de Lengua?
Respuesta: Recuerdo que los tribunales salieron a la hora de la siesta. Yo estaba planificando mi verano esa semana. Iba a ser el primer verano de oposición sin que yo formase parte de ellas. Yo ya no tenía oposiciones, había terminado mis prácticas satisfactoriamente… y fue cuando vi mi nombre en la lista. Esa tarde lloré. De rabia, de impotencia. No quería volver a ese proceso que tanto me había supuesto años atrás. Quería un verano tranquilo después de un año personalmente complejo. Pero ser tribunal no siempre se elige. Así que volví al examen de oposiciones por tercer año consecutivo, pero esta vez estaba al otro lado.
No todos teníamos el mismo juicio ante lo que debíamos solicitar a los opositores, pero la relación entre nosotros fue maravillosa.
Pregunta: ¿Cómo fue tu relación con los otros miembros del tribunal?
Respuesta: Al principio todos íbamos contrariados. Nadie quería pasar el verano allí. Poco a poco la confianza fue aumentando y compartimos muchos ratos y experiencias fuera de lo estrictamente laboral. Si bien no todos teníamos el mismo juicio ante lo que debíamos solicitar a los opositores, la relación entre nosotros fue maravillosa. Las discrepancias se dialogaban. Algo que creo imprescindible en un ambiente como ese.
Un tribunal influye muchísimo en las oposiciones de Lengua
Pregunta: ¿En qué sentido crees que puede influir un tribunal en las oposiciones de Lengua?
Respuesta: Muchísimo. Nosotros dialogábamos y debatíamos sobre las rúbricas y sobre lo que esperábamos encontrarnos. Aunque teníamos nuestro propio punto de vista, intentábamos ser flexibles y admitir las opiniones de nuestros compañeros. No en todos los tribunales sucede esto. Quizás en otros el más estricto contagie a todos. O en otros no se dialogue en absoluto.
He trabajado muy duro y he aprendido muchísimo sobre la LOMLOE
Pregunta: ¿Qué es lo mejor que te ha pasado durante tu experiencia como miembro de un tribunal de oposiciones?
Respuesta: Solo podría destacar dos cosas. La primera, felicitarme a mí misma por todo ese trabajo duro (y mal pagado) que realicé durante el mes de julio después de haberlo dado todo durante el curso escolar. La segunda, que aprendí muchísimo sobre la LOMLOE y sobre actividades y enfoques muy útiles e interesantes. Hay opositores muy entregados y preparados.
Corregir tantos exámenes en tiempo record me produjo pesadillas durante varios días
Pregunta: ¿Qué ha sido lo peor de tu experiencia como miembro de un tribunal de oposiciones?
Respuesta: Empatizar con la angustia de los opositores. Que se levanten con el examen en blanco. Notar sus nervios en los exámenes orales. Aunque es cierto que lo peor y lo más angustioso ha sido tener que corregir tantos exámenes en un tiempo récord, lo que nos obligaba a echar muchas horas. Tuve hasta pesadillas esos días. Tampoco había tiempo suficiente para los orales, ya que al llegar a casa después de horas de escucha debía seguir trabajando para corregir las programaciones.
Haber obtenido mi plaza en la última convocatoria me sirvió mucho
Pregunta: ¿Te sirvieron las experiencias y enseñanzas como opositora de alguna forma en el tribunal?
Respuesta: Bastante. De hecho, al haber obtenido mi plaza en la última convocatoria, me sirvió para conocer el proceso, recordar los temas, dominar los comentarios y empatizar con los opositores.
Las causas principales de los suspensos fueron el desconocimiento de los temas o de cómo realizar los comentarios
Pregunta: ¿Cuántos opositores había en tu tribunal? ¿Cuántos suspendieron el tema y el comentario? ¿Cuáles son las causas fundamentales de los suspensos?
Respuesta: En el listado aparecían 85, sin embargo, al examen acudieron 79 personas. De estas, 11 se levantaron al pasar el tiempo establecido, dejando su examen en blanco. Otras personas realizaron (o más bien intentaron improvisar) solo el tema o algún comentario. No todo el mundo realizaba el examen completo. Este hecho me sorprendió. Aprobaron 32 la primera parte y 30 personas ambas partes. La causa principales fueron: desconocimiento de los temas del sorteo o desconocimiento de cómo realizar los comentarios.
Todos los que obtuvieron plaza hicieron muy bien la exposición oral
Pregunta: ¿Cuántas personas obtuvieron la plaza? ¿Se pueden señalar algunas virtudes que compartieran estas personas?
Respuesta: En mi tribunal había 14 plazas, sin embargo, luego otorgaron 2 más. En total fueron 16 los afortunados. Todos ellos hicieron muy buena exposición oral. Algunos incluso carecían de experiencia docente. Lamentablemente, no identifico sus exámenes escritos, pero probablemente obtuvieron buenas calificaciones también en la parte A.
Mi consejo es cuántos más temas mejor y cuánto mejor, mejor.
Pregunta: ¿Cuál es el mejor consejo que puedes dar a quienes se preparan las oposiciones de Lengua de cara al examen del tema?
Respuesta: Mi consejo es cuántos más temas mejor y cuánto mejor, mejor. Parece obvio, pero hablo con muchas opositoras que hacen y rehacen temas sin sentarse en realidad a estudiarlos, a memorizarlos. Hay que estudiar y hay que echar horas. También es importante cronometrar bien el examen.
Para preparar el comentario hay que practicar mucho y llevar una plantilla de cada tipo
Pregunta: ¿Cuál es el mejor consejo que puedes dar a quienes se preparan las oposiciones de Lengua de cara al comentario?
Respuesta: Otra obviedad: hay que practicar. Además, recomiendo llevar memorizada un plantilla por prototipo de pregunta (filológico, lingüístico…). Y otro consejo: si sabes hacerlo, ve a por el comentario filológico.
En las encerronas no aburras al tribunal
Pregunta: ¿Cuál es el mejor consejo que puedes en lo referente a la programación y a la encerrona?
Respuesta: No aburras al tribunal. Lleva allí días y horas. Ha visto y oído mucho. Modula la voz al hablar y haz que tu exposición sea interesante, no que solo sea una retahíla de normas y puntos. Me sorprendieron mucho algunas exposiciones. Un opositor dibujó en la pizzara un escenario de teatro (cortinas, escenario, focos…) y cada elemento era punto de su programación; otras dibujaron un camino donde se iba viajando a los diferentes puntos. Otro utilizó la música como metáfora.
Yo quitaría la subjetividad del proceso
Pregunta: ¿Que cambiarías del sistema de oposiciones?
Respuesta: La subjetividad. Es complejo, pero podrían hacerse exámenes tipo test. También eso de que muchas no pasen el corte a pesar de haber aprobado ambos exámenes. Es bastante injusto.